ME DIRIJO A VOSOTROS
Seres humanos, que Me buscan, Me encontrarán … pero su búsqueda tiene que ser sincera; tienen que desear sinceramente obtener verdadera claridad sobre el Ser Que reconocen como poder sobre sí mismos; tienen que buscar seriamente la verdad. Entonces Me buscarán y Yo Me dejaré encontrar por ellos. El ser humano ha recibido de Mí el don de poder pensar, y las más diversas ondas de pensamiento que tienen su salida en el reino espiritual ahora giran alrededor de él. De él depende qué ondas de pensamiento acepta y cómo las utiliza a través de su capacidad de pensar e intelecto …
Nadie puede afirmar que tiene que pensar exactamente así y no de otra manera, tal y como él lo hace … Puede aceptar pensamientos con total libertad o rechazarlos, pero que se le diga una cosa: que la voluntad, de aprender la verdad sobre Mí, sobre el Poder Que todo lo crea, también le garantiza los pensamientos que son correctos y verdaderos, y que ahora adoptará estos pensamientos … Porque Yo Mismo Me cuido de quienes que Me buscan, de quienes desean aprender la verdad. Por lo tanto, también es posible para todo ser humano de reconocerme; de lo contrario no os habría encomendado la tarea terrenal de lograr la unificación Conmigo … Si os exijo que establezcáis la unificación Conmigo, entonces también tenéis que hacer posible que aprendáis a conocerme, y eso sólo puede suceder a través de la actividad pensativa, pero cuya dirección determináis vosotros mismos a través de vuestra voluntad.
Todo ser humano es intelectualmente activo, pero la dirección de la voluntad de los seres humanos es diferente y así también loes su pensamiento … Pero si la voluntad se dirige hacia la verdad, entonces indiscutiblemente se acercará a esta verdad, entonces los pensamientos correctos fluirán hacia él, y los tomará y los procesará, y el resultado será que reconocerá con confianza a un Ser superior Que se encuentra en la más alta perfección.
Si os doy a vosotros, los humanos, esta seguridad de que vuestra búsqueda nunca será infructuosa, de que Me dejaré encontrar por vosotros, los humanos, porque Yo Mismo anhelo vuestra unificación Conmigo, entonces ningún ser humano podrá liberarse de la responsabilidad de haber determinado su propia actitud hacia Mí, pues fue cuestión de su propia voluntad. Desde Mi parte se lo facilitaré, pues los pensamientos correctos fluirán hacia él mientras su voluntad sea recta … mientras desea conocerme, mientras desea encontrarme. Pero no se podrá emplear la violencia, ni por Mí, ni por Mi adversario …
Y sería verdaderamente la luz más brillante en la Tierra si todos buscaran a su Dios y Creador desde la eternidad, si sus pensamientos se concentraran en Aquel a Quien deben su existencia … Pero Yo estoy casi completamente excluido de los pensamientos de los humanos, y quienes tienen una fe débil en un Dios y Creador no Me buscan con la suficiente intensidad … Por lo tanto, no puedo revelarme a ellos, no puedo imponerme a ellos y guiarlos hacia la verdad en contra de su voluntad. Y así, sólo unos pocos Me encuentran, porque pocos Me buscan con seriedad …
Sin embargo, el intelecto está incansablemente activo; capta y procesa ondas de pensamientos que se refieren a asuntos y objetivos terrenales; los seres humanos están evidentemente influenciados por el reino espiritual, cuyas fuerzas buscan propagar el error, pues su voluntad determina de qué naturaleza son sus pensamientos que les llegan. Sin embargo, Yo no puedo revelarme a ellos, no puedo darme a conocer, para no influir coercitivamente en su voluntad … Tengo que seguir reteniendo la transmisión de la verdad hasta que ellos mismos la deseen, hasta que Me busquen por su propia voluntad … pero entonces, con certeza, Me dejo encontrar, porque sólo entonces podrán cumplir con su tarea terrenal: establecer la unificación Conmigo, que ahora garantiza el regreso definitivo a Mí, a la casa del Padre …
Amén